ENTREVISTA CON CARLOS FRADE (1):
Aunque ya hace algunas semanas que ha terminado la competición para el UBLP, todavía faltaba en nuestra web el habitual análisis de postemporada a cargo del técnico Carlos Frade, sin duda uno de los grandes artífices del magnífico papel realizado por el conjunto blanquiazul. Después de varios días 'desconectado' tras un año intenso y estresante, el entrenador madrileño ha contestado de manera serena y reflexiva a un amplio cuestionario en el que ningún aspecto reseñable de la temporada se ha quedado en el tintero, tanto que hemos optado por publicar la entrevista en tres entregas. Esperamos que la disfruten.
© FOTO: César Borja
UB LA PALMA
Bueno Carlos, ya han pasado casi tres semanas desde el último partido y seguro que has tenido tiempo de analizar todo lo sucedido en estos siete meses de competición... ¿qué valoración global haces de la temporada?
Todavía sigo con el regusto amargo del final del play-off, eso hace que no saborees la totalidad de la temporada ni seas capaz de apreciar en toda su amplitud el mérito de lo que hemos hecho. Se dice pronto, pero hacer la mejor temporada en la historia del club en términos de victorias, con los grandes entrenadores y jugadores que han pasado por aquí, es para estar muy contento. Además, siendo el equipo más joven y barato de la historia del UB La Palma en Oro, me agrada aún más. Eso significa que se le ha sacado el mayor provecho a cada euro invertido. Como gestor de grupo me hace estar orgulloso, y más aún en este tiempo problemático económicamente.
Por otro lado, la aportación al primer equipo, tanto en entrenamientos como en partidos, ha sido constante y valiosa durante toda la temporada, lo que hace que el objetivo primordial se haya cumplido. El ahorro de dinero que esto le ha supuesto al Gran Canaria durante esta temporada ha sido tremendo, y la ganancia en experiencia para nuestros chicos lo ha sido más aún. Hay que recordar que –prácticamente- todos los jugadores han estado alguna vez allí. Que mejoremos a los jugadores, suban a entrenar con el primer equipo y se queden allí entrenando es ya de por sí un premio y reconocimiento a todos los que estamos aquí, y si además juegan y se quedan fijos en el equipo, entonces ya ni te imaginas la satisfacción...
Empezando por el final: ¿te decepcionó el resultado del play-off ante el Grupo Iruña o el premio ya era estar ahí?
En sí es un premio, indudablemente; ahora bien, también somos conscientes de que, aunque en algunos aspectos Grupo Iruña si era mejor que nosotros, en otros no. Globalmente creo que estábamos muy igualados y merecimos tanto como ellos pasar.
La clave estuvo en el segundo partido, que a mí entender debimos haber ganado también. Ellos estaban muy tocados y teníamos una buena situación para hacerlo, pero no lo hicimos y ellos se vinieron arriba. Aún así, en casa pudimos hacerlo...
La lesión de Antonio Peña fue muy inoportuna al ser el mejor del equipo en los dos primeros partidos, y una pieza clave tácticamente que ellos estaban teniendo problemas para defender y que nos hizo perder la ventaja teórica que teníamos contra sus tres pívots. El ritmo que intentamos darle al juego no se tradujo en el desgaste que queríamos, sobretodo en faltas personales, para el rival: casi 30 faltas más para nosotros en el total de la serie es un poco exagerado. Y por último, ellos se mostraron muy acertados en los momentos importantes.
¿No te quedó la sensación que no se supo “vender” al aficionado ese momento histórico de la temporada? ¿Qué faltó transmitirle más ilusión al aficionado desde el club, medios de comunicación...?
No sé cual fue le problema, pero si es cierto que no había esa sensación de estar en la mejor temporada en la historia del club. Además, además habiendo dado la vuelta a la ventaja campo en el primer partido, lo suyo hubiera sido un pabellón a reventar todo el fin de semana...
En general, ¿qué ha sido lo mejor del año en tu opinión, eso con lo qué te quedas por encima de todo?
La progresión de muchos jugadores que van acercándose al nivel ACB que queríamos desde el inicio del proyecto, hace ya muchos años. Cuando piensas en todas las horas invertidas por muchos entrenadores de los chicos desde que estaban en la cantera del Granca hace muchos años, hasta este viaje en La Palma, te alegras no sólo por los chicos sino también por todos los entrenadores que les han ayudado. Y por supuesto, que esto mismo vale para los que vienen de otros sitios.
Dentro de esa progresión hemos aprendido como equipo a NO PONER EXCUSAS y centrarnos en el trabajo a pesar de las circunstancias; esforzarnos para hacerlo lo mejor posible a pesar de lo que suceda. Eso es lo que más me ha gustado.
¿Crees que haberlo tan bien este año equivale a haberse colocado un listón muy alto de cara a la próxima temporada?
No necesariamente. Estamos ya preparando lo que queremos que sea el equipo de la temporada que viene y me apetece mucho. Probablemente sea más joven y debemos aprovechar eso. El listón se lo pone cada día cada uno en su trabajo, no depende de que el equipo de la temporada anterior lo hiciera bien o no. Fuera del entorno del equipo es inevitable que la gente compare, pero no es asunto nuestro ni una preocupación para mí.
¿Y lo peor, aquello de lo que sería mejor olvidarse...?
Nada. Estoy muy satisfecho de lo que hemos hecho, aunque está claro que hemos cometido errores dentro y fuera de la pista que debemos mejorar para ser más competitivos la temporada que viene y que hay que tenerlos presente para progresar: técnicamente, tácticamente, entrenamientos específicos, decisiones tácticas, confección de equipo... Olvidar nada, aprender si.
¿Te sorprendido algo en particular de tu equipo durante la liga?
La capacidad para controlar muchos partidos igualados que hemos tenido en casi toda la liga, cuando lo lógico era que los rivales más experimentados lo hicieran. Muchos jugadores del UBLP dieron un paso adelante y tomaron buenas decisiones en momentos de presión. Muy bien en ese sentido.
A nivel deportivo, ¿cuál ha sido el mejor momento de la temporada, ese partido para conservar en la retina?
Hubo momentos en la pretemporada que fueron muy especiales y que ayudaron mucho a construir el equipo, tales como sesiones físicas muy duras pero también muy reconfortantes. En cuanto a partidos, ha habido algunos muy buenos y que como entrenador te hacen sentir bien por las circunstancias en que los afrontamos y por como trabajamos para superar las dificultades que teníamos, aunque perdiéramos: citaría los partidas ante Burgos, La Rioja fuera, el primero de play-off contra Navarra, Lleida fuera y otros más...
¿Y el peor?
En general, la sensación de llegar a casa tras un partido y saber que has hecho mal las cosas que entrenas; dar la sensación de que no estás entrenando ni aprovechando el tiempo. Esto es especialmente doloroso tras un partido en el que metes más puntos que el contrario, si, pero a pesar de que anotas más puntos estás muy lejos de haber ganado. Cierto es que no ha sucedido muchas veces, pero si demasiadas para mi gusto...
CONTINUARÁ...
© FOTO: César Borja
UB LA PALMA
Bueno Carlos, ya han pasado casi tres semanas desde el último partido y seguro que has tenido tiempo de analizar todo lo sucedido en estos siete meses de competición... ¿qué valoración global haces de la temporada?
Todavía sigo con el regusto amargo del final del play-off, eso hace que no saborees la totalidad de la temporada ni seas capaz de apreciar en toda su amplitud el mérito de lo que hemos hecho. Se dice pronto, pero hacer la mejor temporada en la historia del club en términos de victorias, con los grandes entrenadores y jugadores que han pasado por aquí, es para estar muy contento. Además, siendo el equipo más joven y barato de la historia del UB La Palma en Oro, me agrada aún más. Eso significa que se le ha sacado el mayor provecho a cada euro invertido. Como gestor de grupo me hace estar orgulloso, y más aún en este tiempo problemático económicamente.
Por otro lado, la aportación al primer equipo, tanto en entrenamientos como en partidos, ha sido constante y valiosa durante toda la temporada, lo que hace que el objetivo primordial se haya cumplido. El ahorro de dinero que esto le ha supuesto al Gran Canaria durante esta temporada ha sido tremendo, y la ganancia en experiencia para nuestros chicos lo ha sido más aún. Hay que recordar que –prácticamente- todos los jugadores han estado alguna vez allí. Que mejoremos a los jugadores, suban a entrenar con el primer equipo y se queden allí entrenando es ya de por sí un premio y reconocimiento a todos los que estamos aquí, y si además juegan y se quedan fijos en el equipo, entonces ya ni te imaginas la satisfacción...
Empezando por el final: ¿te decepcionó el resultado del play-off ante el Grupo Iruña o el premio ya era estar ahí?
En sí es un premio, indudablemente; ahora bien, también somos conscientes de que, aunque en algunos aspectos Grupo Iruña si era mejor que nosotros, en otros no. Globalmente creo que estábamos muy igualados y merecimos tanto como ellos pasar.
La clave estuvo en el segundo partido, que a mí entender debimos haber ganado también. Ellos estaban muy tocados y teníamos una buena situación para hacerlo, pero no lo hicimos y ellos se vinieron arriba. Aún así, en casa pudimos hacerlo...
La lesión de Antonio Peña fue muy inoportuna al ser el mejor del equipo en los dos primeros partidos, y una pieza clave tácticamente que ellos estaban teniendo problemas para defender y que nos hizo perder la ventaja teórica que teníamos contra sus tres pívots. El ritmo que intentamos darle al juego no se tradujo en el desgaste que queríamos, sobretodo en faltas personales, para el rival: casi 30 faltas más para nosotros en el total de la serie es un poco exagerado. Y por último, ellos se mostraron muy acertados en los momentos importantes.
¿No te quedó la sensación que no se supo “vender” al aficionado ese momento histórico de la temporada? ¿Qué faltó transmitirle más ilusión al aficionado desde el club, medios de comunicación...?
No sé cual fue le problema, pero si es cierto que no había esa sensación de estar en la mejor temporada en la historia del club. Además, además habiendo dado la vuelta a la ventaja campo en el primer partido, lo suyo hubiera sido un pabellón a reventar todo el fin de semana...
En general, ¿qué ha sido lo mejor del año en tu opinión, eso con lo qué te quedas por encima de todo?
La progresión de muchos jugadores que van acercándose al nivel ACB que queríamos desde el inicio del proyecto, hace ya muchos años. Cuando piensas en todas las horas invertidas por muchos entrenadores de los chicos desde que estaban en la cantera del Granca hace muchos años, hasta este viaje en La Palma, te alegras no sólo por los chicos sino también por todos los entrenadores que les han ayudado. Y por supuesto, que esto mismo vale para los que vienen de otros sitios.
Dentro de esa progresión hemos aprendido como equipo a NO PONER EXCUSAS y centrarnos en el trabajo a pesar de las circunstancias; esforzarnos para hacerlo lo mejor posible a pesar de lo que suceda. Eso es lo que más me ha gustado.
¿Crees que haberlo tan bien este año equivale a haberse colocado un listón muy alto de cara a la próxima temporada?
No necesariamente. Estamos ya preparando lo que queremos que sea el equipo de la temporada que viene y me apetece mucho. Probablemente sea más joven y debemos aprovechar eso. El listón se lo pone cada día cada uno en su trabajo, no depende de que el equipo de la temporada anterior lo hiciera bien o no. Fuera del entorno del equipo es inevitable que la gente compare, pero no es asunto nuestro ni una preocupación para mí.
¿Y lo peor, aquello de lo que sería mejor olvidarse...?
Nada. Estoy muy satisfecho de lo que hemos hecho, aunque está claro que hemos cometido errores dentro y fuera de la pista que debemos mejorar para ser más competitivos la temporada que viene y que hay que tenerlos presente para progresar: técnicamente, tácticamente, entrenamientos específicos, decisiones tácticas, confección de equipo... Olvidar nada, aprender si.
¿Te sorprendido algo en particular de tu equipo durante la liga?
La capacidad para controlar muchos partidos igualados que hemos tenido en casi toda la liga, cuando lo lógico era que los rivales más experimentados lo hicieran. Muchos jugadores del UBLP dieron un paso adelante y tomaron buenas decisiones en momentos de presión. Muy bien en ese sentido.
A nivel deportivo, ¿cuál ha sido el mejor momento de la temporada, ese partido para conservar en la retina?
Hubo momentos en la pretemporada que fueron muy especiales y que ayudaron mucho a construir el equipo, tales como sesiones físicas muy duras pero también muy reconfortantes. En cuanto a partidos, ha habido algunos muy buenos y que como entrenador te hacen sentir bien por las circunstancias en que los afrontamos y por como trabajamos para superar las dificultades que teníamos, aunque perdiéramos: citaría los partidas ante Burgos, La Rioja fuera, el primero de play-off contra Navarra, Lleida fuera y otros más...
¿Y el peor?
En general, la sensación de llegar a casa tras un partido y saber que has hecho mal las cosas que entrenas; dar la sensación de que no estás entrenando ni aprovechando el tiempo. Esto es especialmente doloroso tras un partido en el que metes más puntos que el contrario, si, pero a pesar de que anotas más puntos estás muy lejos de haber ganado. Cierto es que no ha sucedido muchas veces, pero si demasiadas para mi gusto...
CONTINUARÁ...
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