El Canarias superó al UBLP en el derbi (82-68)
El conjunto de Carlos Frade fue siempre por detrás en el marcador debido -en buena medida- a su escaso acierto en el lanzamiento exterior, lo que se reflejó en un pobre 3/17 desde más allá de la línea de 6,75. El encuentro se rompió en el tramo final del segundo cuarto con un parcial de 11-0 para los aurinegros, quienes supieron sacar partido a dos técnicas señalizadas a los palmeros seguidas de dos triples consecutivos de Albert Sabat. En los blanquiazules sobresalió Dinma Odiakosa con 13 puntos y 12 rebotes para un soberbio 28 de valoración, mientras que Juan Palacios aportó otros 13 tantos en ataque. Por su parte, Richi Guillén fue el máximo anotador del partido con 18 puntos, bien secundado por los 15 de Mike Gansey y los 13 de Sabat.
FOTO: Delia Padrón / LA OPINIÓN
FRAN HERRERA / CARLOS GARCÍA
El UB La Palma seguirá una temporada más sin saber lo que es ganar un derbi provincial jugando de visitante. En la noche de hoy el equipo de Carlos Frade se vio superado con cierta claridad por un Isla de Tenerife Canarias mucho más metido en el partido desde el principio y que acabó llevándose la victoria por 82-68 en el choque correspondiente a la 20ª jornada de la Liga Adecco Oro. Además, los de Alejandro Martínez contaron durante los cuarenta minutos con el apoyo de una afición que casi llenó el Pabellón “Santiago Martín” y que llevó en volandas a los suyos. Al descanso ya mandaban también los locales por 41-29 gracias a un parcial de 11-0 logrado en los últimos dos minutos del segundo cuarto, cuando los colegiados le señalaron una técnica al entrenador palmero Carlos Frade y, seguidamente, otra a Sebas Arrocha, por protestar ambos una falta no señalada sobre Bonhome. A partir de entonces fueron los canaristas los que, gracias en gran parte a su buen trabajo defensivo, manejaron siempre el tempo de juego hasta el final del choque.
El Isla de Tenerife Socas Canarias tiró de libro. Sabedor de que el UB La Palma iba a tratar de asfixiarle con su habitual presión, el conjunto de Alejandro Martínez respondió a la perfección con un baloncesto de pizarra, tan paciente como efectivo no sólo para salir de la telaraña palmera sino –además- para buscar casi siempre la mejor opción en la canasta visitante. En una gran producción colectiva -con seis jugadores llegando a la decena de puntos- el conjunto lagunero dio siempre mayores sensaciones de estar más cerca que su adversario del ritmo que más convenía al juego, una situación que la propia escuadra palmera agravó con un pobre porcentaje exterior (3/17 en triples).
La lógica imperó en el arranque y el encuentro tuvo unos primeros minutos eléctricos, con un Canarias que no consumía demasiados segundos en sus ataques y un UBLP que salió con la quinta velocidad ya puesta. Sin embargo, el acierto en los locales fue mayor, sobre todo porque supieron discernir perfectamente dónde estaba la fina línea que separa un ritmo vertiginoso de la precipitación. Ante la presión mordiente de los palmeros, el cuadro de Alejandro Martínez abrió el campo en busca de espacios que encontró con cierta asiduidad. Así, entre Richi Guillén y Mike Gansey -muy activo y efectivo saliendo desde el banco- originaron la primera brecha de cierta importancia (16-10) a los siete minutos.
El cuadro visitante, fiel a su estilo de hacer continuas rotaciones -lo que a su vez obligó a Martínez a mover más de la cuenta su banquillo- acusaba la casi nula aportación de sus buques insignias. Palacios metió cuatro puntos de entrada para luego diluirse en su acierto ofensivo, mientras que Sebas Arrocha tampoco tenía su mejor día de cara al aro ante la buena defensa a la que fue sometido por Richotti y Gansey. Esa circunstancia se tradujo en unos pobres porcentajes de tiro: 4/13 en tiros de dos y 0/6 desde más allá del 6,75 al finalizar el primer acto. Con todo, el Isla de Tenerife Canarias sólo tenía seis puntos de ventaja (18-12).
Muy poco cambió el panorama en el segundo periodo, si bien los palmeros, vista su incapacidad desde el exterior, decidieron irse a la guerra del músculo y cargar más su juego por dentro. Así, a la vez que metían a los postes canaristas en problemas de personales, los de Carlos Frade apretaron el electrónico gracias a un inmaculado 9/9 en tiros libres (22-21). El UBLP parecía por momentos que comenzaba a sentirse más cómodo sobre el parqué, pero al Canarias no se cegó ante la presión cada vez más arriba de su oponente y volvió a mover con inteligencia el balón para mantenerse en ventaja (30-24) de la mano de Guillén y Chagoyen.
Casi al borde del descanso, y con un marcador exiguo (32-27) reflejo de la intensidad con la que ambos equipos se aplicaban en tareas defensivas, el Canarias se encontró con un regalo caído del cielo cuando el colegiado Palenzuela Pastrana quiso erigirse en protagonista del derbi y le señaló sendas técnicas a Carlos Frade y Sebas Arrocha por protestar una acción en la que su compañero Rodríguez Cubero había pitado falta de Guillén sobre Bonhome y que Palenzuela obvió para indicar que se había agotado la posesión de 24 segundos. Esa decisión, injusta a todas luces, derivó en un parcial de 11-0 gracias al acierto de Guillén desde la línea de 4,60 y a dos triples consecutivos de Albert Sabat, llegándose al intervalo con un 41-27 que ponía el partido demasiado cuesta arriba para un UBLP que -bien es cierto- seguía sin solucionar sus problemas en el tiro exterior (8/25 en tiros de dos y 0/8 en triples al descanso),
En los compases iniciales del tercer cuarto, y a pesar del triple inicial de Román Martínez, los locales se pusieron el traje de faena atrás y en ataque supieron tener el aplomo suficiente para dar casi siempre con la mejor opción. Cuando no hubo canasta, Guillén sacó a relucir ese particular don para estar dónde es necesario y capturar dos rebotes ofensivos. Otro tanto hizo Mike Gansey. De esta forma, los laguneros se movieron siempre con rentas que rondaron la decena de puntos (46-34), si bien llegaron a dispararse hasta los 16 en dos ocasiones, la segunda de ellas tras los triples de Chagoyen y Nacho Yáñez que rompían la zona 2-3 ordenada por Frade (58-42). Una tímida reacción le valió al UB para acabar el cuarto con un parcial de 2-8 y ponerse a diez (60-50) tras una penetración de Alex López.
En el arranque del último periodo Sebas Arrocha tuvo un triple en sus manos para haber acercado aún más a los suyos, pero el balón no entró, todo lo contrario que en la cesta palmera tras el lanzamiento de Mike Gansey. Tras la posterior canasta de Odiakosa, los blanquiazules se entonaron en defensa pero perdonaron varios ataques para meterse de nuevo en el partido. Por su parte, el Canarias seguía sacando rédito de una exquisita paciencia en ataque a la vez que se mostraba muy sólido atrás, dejando a su oponente en dos puntos durante los primeros seis minutos del cuarto.
Tras una canasta de Guillén, cinco puntos consecutivos de Nacho Yáñez –triple incluido- y una suspensión de Serrano, los de Alejandro Martínez llegaron a alcanzar su máxima renta de toda la noche (74-55), volteando así los 18 tantos por los que cayeron en Santa Cruz de La Palma en el choque de la primera vuelta. Sin embargo, el cuadro blanquiazul siguió peleando en cada acción, lo que unido al gran trabajo de Odiakosa y el despertar ofensivo de Juan Palacios, le permitió adecentar un tanto los guarismos finales, o lo que es lo mismo, el 82-68 que reflejaba el luminoso del “Santiago Martín” en el momento de sonar el bocinazo que daba por terminado un derbi en el que el Canarias ofreció buenas sensaciones, mientras que el UBLP deberá seguir trabajando para seguir corrigiendo ciertos aspectos de su juego que ofrecieron ciertas dudas.
Isla de Tenerife Canarias: Albert Sabat (13), Nicolás Richotti (2), Rod Flemings (11), Richi Guillén (18) y Jesús Chagoyen (10) - quinteto inicial- Iker Urreizti (0), Mike Gansey (15), Nacho Yañez (11), Nayal Koshwal (0) y Víctor Serrano (2).
UB La Palma: Dani Rodríguez (3), Sebas Arrocha (6), Román Martínez (7), Juan Diego Palacios (13) y Roeland Schaftenaar (6) - Christian Díaz (0), Alex López (9), Joaquín Bonhome (7), Dinma Odiakosa (13) y Jan Orfila (4).
Parciales cada 5 minutos: 10-8, 18-12, 26-23 y 41-29 (descanso); 52-36, 60-50, 68-52 y 82-68 (final).
Árbitros: Miguel Ángel Palenzuela Pastrana y Álvaro Rodríguez Cubero. Regular actuación. Le señalaron una falta técnica al entrenador visitante Carlos Frade (18’) y otra al jugador Sebas Arrocha (18’) por protestar. Excluyeron por faltas personales al jugador visitante Román Martínez (37’) y al local Víctor Serrano (38’).
Incidencias: partido disputado en el Pabellón Insular “Santiago Martín” de Los Majuelos” ante unos 3.000 espectadores, entre ellos un centenar de aficionados palmeros. Magnífico ambiente en la grada. En la previa del choque la Peña San Benito entregó una placa a la Peña El Gallinero.
FOTOS DEL PARTIDO:
FOTO: Delia Padrón / LA OPINIÓN
FRAN HERRERA / CARLOS GARCÍA
El UB La Palma seguirá una temporada más sin saber lo que es ganar un derbi provincial jugando de visitante. En la noche de hoy el equipo de Carlos Frade se vio superado con cierta claridad por un Isla de Tenerife Canarias mucho más metido en el partido desde el principio y que acabó llevándose la victoria por 82-68 en el choque correspondiente a la 20ª jornada de la Liga Adecco Oro. Además, los de Alejandro Martínez contaron durante los cuarenta minutos con el apoyo de una afición que casi llenó el Pabellón “Santiago Martín” y que llevó en volandas a los suyos. Al descanso ya mandaban también los locales por 41-29 gracias a un parcial de 11-0 logrado en los últimos dos minutos del segundo cuarto, cuando los colegiados le señalaron una técnica al entrenador palmero Carlos Frade y, seguidamente, otra a Sebas Arrocha, por protestar ambos una falta no señalada sobre Bonhome. A partir de entonces fueron los canaristas los que, gracias en gran parte a su buen trabajo defensivo, manejaron siempre el tempo de juego hasta el final del choque.
El Isla de Tenerife Socas Canarias tiró de libro. Sabedor de que el UB La Palma iba a tratar de asfixiarle con su habitual presión, el conjunto de Alejandro Martínez respondió a la perfección con un baloncesto de pizarra, tan paciente como efectivo no sólo para salir de la telaraña palmera sino –además- para buscar casi siempre la mejor opción en la canasta visitante. En una gran producción colectiva -con seis jugadores llegando a la decena de puntos- el conjunto lagunero dio siempre mayores sensaciones de estar más cerca que su adversario del ritmo que más convenía al juego, una situación que la propia escuadra palmera agravó con un pobre porcentaje exterior (3/17 en triples).
La lógica imperó en el arranque y el encuentro tuvo unos primeros minutos eléctricos, con un Canarias que no consumía demasiados segundos en sus ataques y un UBLP que salió con la quinta velocidad ya puesta. Sin embargo, el acierto en los locales fue mayor, sobre todo porque supieron discernir perfectamente dónde estaba la fina línea que separa un ritmo vertiginoso de la precipitación. Ante la presión mordiente de los palmeros, el cuadro de Alejandro Martínez abrió el campo en busca de espacios que encontró con cierta asiduidad. Así, entre Richi Guillén y Mike Gansey -muy activo y efectivo saliendo desde el banco- originaron la primera brecha de cierta importancia (16-10) a los siete minutos.
El cuadro visitante, fiel a su estilo de hacer continuas rotaciones -lo que a su vez obligó a Martínez a mover más de la cuenta su banquillo- acusaba la casi nula aportación de sus buques insignias. Palacios metió cuatro puntos de entrada para luego diluirse en su acierto ofensivo, mientras que Sebas Arrocha tampoco tenía su mejor día de cara al aro ante la buena defensa a la que fue sometido por Richotti y Gansey. Esa circunstancia se tradujo en unos pobres porcentajes de tiro: 4/13 en tiros de dos y 0/6 desde más allá del 6,75 al finalizar el primer acto. Con todo, el Isla de Tenerife Canarias sólo tenía seis puntos de ventaja (18-12).
Muy poco cambió el panorama en el segundo periodo, si bien los palmeros, vista su incapacidad desde el exterior, decidieron irse a la guerra del músculo y cargar más su juego por dentro. Así, a la vez que metían a los postes canaristas en problemas de personales, los de Carlos Frade apretaron el electrónico gracias a un inmaculado 9/9 en tiros libres (22-21). El UBLP parecía por momentos que comenzaba a sentirse más cómodo sobre el parqué, pero al Canarias no se cegó ante la presión cada vez más arriba de su oponente y volvió a mover con inteligencia el balón para mantenerse en ventaja (30-24) de la mano de Guillén y Chagoyen.
Casi al borde del descanso, y con un marcador exiguo (32-27) reflejo de la intensidad con la que ambos equipos se aplicaban en tareas defensivas, el Canarias se encontró con un regalo caído del cielo cuando el colegiado Palenzuela Pastrana quiso erigirse en protagonista del derbi y le señaló sendas técnicas a Carlos Frade y Sebas Arrocha por protestar una acción en la que su compañero Rodríguez Cubero había pitado falta de Guillén sobre Bonhome y que Palenzuela obvió para indicar que se había agotado la posesión de 24 segundos. Esa decisión, injusta a todas luces, derivó en un parcial de 11-0 gracias al acierto de Guillén desde la línea de 4,60 y a dos triples consecutivos de Albert Sabat, llegándose al intervalo con un 41-27 que ponía el partido demasiado cuesta arriba para un UBLP que -bien es cierto- seguía sin solucionar sus problemas en el tiro exterior (8/25 en tiros de dos y 0/8 en triples al descanso),
En los compases iniciales del tercer cuarto, y a pesar del triple inicial de Román Martínez, los locales se pusieron el traje de faena atrás y en ataque supieron tener el aplomo suficiente para dar casi siempre con la mejor opción. Cuando no hubo canasta, Guillén sacó a relucir ese particular don para estar dónde es necesario y capturar dos rebotes ofensivos. Otro tanto hizo Mike Gansey. De esta forma, los laguneros se movieron siempre con rentas que rondaron la decena de puntos (46-34), si bien llegaron a dispararse hasta los 16 en dos ocasiones, la segunda de ellas tras los triples de Chagoyen y Nacho Yáñez que rompían la zona 2-3 ordenada por Frade (58-42). Una tímida reacción le valió al UB para acabar el cuarto con un parcial de 2-8 y ponerse a diez (60-50) tras una penetración de Alex López.
En el arranque del último periodo Sebas Arrocha tuvo un triple en sus manos para haber acercado aún más a los suyos, pero el balón no entró, todo lo contrario que en la cesta palmera tras el lanzamiento de Mike Gansey. Tras la posterior canasta de Odiakosa, los blanquiazules se entonaron en defensa pero perdonaron varios ataques para meterse de nuevo en el partido. Por su parte, el Canarias seguía sacando rédito de una exquisita paciencia en ataque a la vez que se mostraba muy sólido atrás, dejando a su oponente en dos puntos durante los primeros seis minutos del cuarto.
Tras una canasta de Guillén, cinco puntos consecutivos de Nacho Yáñez –triple incluido- y una suspensión de Serrano, los de Alejandro Martínez llegaron a alcanzar su máxima renta de toda la noche (74-55), volteando así los 18 tantos por los que cayeron en Santa Cruz de La Palma en el choque de la primera vuelta. Sin embargo, el cuadro blanquiazul siguió peleando en cada acción, lo que unido al gran trabajo de Odiakosa y el despertar ofensivo de Juan Palacios, le permitió adecentar un tanto los guarismos finales, o lo que es lo mismo, el 82-68 que reflejaba el luminoso del “Santiago Martín” en el momento de sonar el bocinazo que daba por terminado un derbi en el que el Canarias ofreció buenas sensaciones, mientras que el UBLP deberá seguir trabajando para seguir corrigiendo ciertos aspectos de su juego que ofrecieron ciertas dudas.
Isla de Tenerife Canarias: Albert Sabat (13), Nicolás Richotti (2), Rod Flemings (11), Richi Guillén (18) y Jesús Chagoyen (10) - quinteto inicial- Iker Urreizti (0), Mike Gansey (15), Nacho Yañez (11), Nayal Koshwal (0) y Víctor Serrano (2).
UB La Palma: Dani Rodríguez (3), Sebas Arrocha (6), Román Martínez (7), Juan Diego Palacios (13) y Roeland Schaftenaar (6) - Christian Díaz (0), Alex López (9), Joaquín Bonhome (7), Dinma Odiakosa (13) y Jan Orfila (4).
Parciales cada 5 minutos: 10-8, 18-12, 26-23 y 41-29 (descanso); 52-36, 60-50, 68-52 y 82-68 (final).
Árbitros: Miguel Ángel Palenzuela Pastrana y Álvaro Rodríguez Cubero. Regular actuación. Le señalaron una falta técnica al entrenador visitante Carlos Frade (18’) y otra al jugador Sebas Arrocha (18’) por protestar. Excluyeron por faltas personales al jugador visitante Román Martínez (37’) y al local Víctor Serrano (38’).
Incidencias: partido disputado en el Pabellón Insular “Santiago Martín” de Los Majuelos” ante unos 3.000 espectadores, entre ellos un centenar de aficionados palmeros. Magnífico ambiente en la grada. En la previa del choque la Peña San Benito entregó una placa a la Peña El Gallinero.
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